sábado, 31 de octubre de 2015

DICHOSOS

Y Él se puso a hablar, enseñándolos: Dichosos…
(Mt. 5, 1-12)



¡Tú lo has dicho, Señor!
Dichosos nosotros si no triunfa en nuestro corazón
la engañadora confianza en las riquezas.
Dichosos si no genera nuestro corazón
envidias, calumnias o actitudes vengativas hacia los hermanos.
Dichosos si invadimos nuestro corazón de las mismas lágrimas
que llora gran parte de la humanidad.

¡Tú lo has dicho, Señor!
Felices nosotros si nos dejamos el pellejo
en la hondura del hambre y de la sed de nuestros hermanos.
Felices si libramos la batalla a nuestro egoísmo 
y hacemos de la misericordia el trono de nuestros gozos.
Felices  si convertimos la negrura de nuestras vidas
en luz radiante, en transparencia cristalina.  

¡Tú lo has dicho, Señor!
Bienaventurados nosotros si alzamos la bandera de la paz
desde la orilla de nuestro corazón hasta los horizontes lejanos.
Bienaventurados si no nos rendimos ante las injusticias,
si no capitulamos ante el riesgo de ser perseguidos
por tu causa, Señor.

¡Tú mismo lo has dicho, Señor Jesús!
Que ya, ¡desde ahora!,
nos has inscrito en tu agenda pascual. 

martes, 27 de octubre de 2015

UN PASO ADELANTE

Ha finalizado en Roma el Sínodo de los obispos sobre la familia. Un acontecimiento eclesial de inmensa altura. Sin duda va a suponer un paso adelante en el caminar, aunque siempre lento, de la Iglesia. Han sido muchos los temas abordados colegialmente, pero el tema de los divorciados vueltos a casar, por razones de fracaso matrimonial, y la situación humana de los gays han captado sumo interés, por lo que supone de inclusión e integración, y no exclusión, siempre bajo discernimiento y acogida en el amplio marco institucional, litúrgico y pastoral. Diríamos que con el Sínodo termina un escándalo farisaico en la Iglesia y se han abierto horizontes de esperanza. 
Es digno de subrayar también, y que a la larga será decisivo para el futuro de la Iglesia, que el Papa haya decidido gobernar de un modo sinodal, es decir, colegial, caminando con todos, haciendo discernimiento colectivo de los principales asuntos, volviendo sobre los pasos democráticos del Vaticano II.

jueves, 15 de octubre de 2015

ORGULLO DE PERTENENCIA



   
         No sé si me ha pasado lo que a Groucho Marx cuando dijo “nací a muy temprana edad”. Pero la verdad es que, ya en mi edad madura, confieso ser  uno  de esos setenta y pico por ciento de españoles (incluidos catalanes) que se sienten orgullosos de la madre-patria que los vio nacer. Y digo que la marejada secesionista y antisistema, fundamentalista por demás, no cabe en nuestra piel de toro que por muy vieja que sea, aún sirve para “reservar” el buen vino de todos los desafíos.  Lo cual no quiere decir que no comulgue con una  amplia mayoría de españoles que están por una reforma sabia y consensuada de la Constitución, para conformarla a los nuevos tiempos. Desde estas líneas, quiero unirme a cuantos han luchado –y siguen luchando- por nuestro feliz estado de derecho, donde la pluralidad sacraliza esencialmente las raíces de la unidad nacional.
     Parafraseando al genial cómico estadounidense, me atrevo a certificar que estos son mis principios. Y si no les gustan a los ciegos y sordos amantes del independentismo y  la ruptura, les diré que no tengo otros, gracias a la educación en democracia recibida en esta España,  que es “el quinto país más seguro del planeta”, como escribía Bieito Rubido en “su astrolabio” (ABC, 12/10/2015), revelando su orgullo de pertenencia.    

sábado, 10 de octubre de 2015

VENDER

Una cosa te falta, anda vende lo que tienes…
 (Mc. 10, 17-30)

Amigo rico,
has tanteado de cerca al Maestro
que te miró con gran cariño…

Como buen judío,
cumplías a la perfección tu ideario religioso
y hasta creías en el dinero
como bendición de Dios,
recompensa de buen gestor…

Pero por ahí
no corre la osadía cristiana
que enseñaba el Maestro.

El dinero no enlaza con el Paraíso,
porque
es ruido que ensordece
y no deja escuchar el dolor de la gente.

El Hijo de Dios se humanizó en la pobreza,
y en la pobreza arrastró a  sus discípulos
y en la pobreza
está la única libertad que merece vivirse…

Tu candor que ilusionó tanto al Maestro
cayó por tierra,
junto al ojo de la aguja.
Una cosa te faltaba…
¡vender!

Vuelve, pues, a tu arroyo virgen
y entenderás que vender a favor del pobre
es comprar la vida.

Ánimo, amigo rico,
no te marches entristecido
que la audacia del evangelio
tutela los desapegos del corazón.

¡Anda, dalo a los pobres
y sígueme!

viernes, 9 de octubre de 2015

VOLUNTARIAMENTE SORDOS

Manuel Alcántara, columnista de “Ideal”,  llama al nacionalismo “una manía de primates”, y para François Hollande  “el nacionalismo es guerra”…  Para mí, que no entiendo nada de nada de lo que está pasando en Cataluña,  el nacionalismo independentista es, simplemente, sinónimo de sordera… y -¡cómo no!- de ceguera. No lo digo sólo por la voz salida de las urnas el pasado septiembre, unida a la manipulación sufrida en la campaña electoral. Ésa es también la impresión que me dio la actitud de los “voluntariamente sordos” que abandonaron sus sillones para no oír a su Jefe de Estado, profeta de la unidad-España, no sin antes desplegar ante la Cámara, en lleno absoluto, la bandera republicana.


Pero me tomo hoy la licencia de transcribir unos sabrosos renglones de la columna de mi querido Alcántara: “Hubo plantones y banderas cuando hablaba el Rey, pero lo peor fue la actitud de los voluntariamente sordos que no quisieron oírle y dejaron los escaños vacíos. Los mayores enemigos  de Babel siguen siendo los sordomudos. Sabemos que no siempre se entiende la gente hablando, pero es más difícil entenderse sustituyendo las palabras por banderas… Los parlamentarios están tan mal educados que no sólo se niegan a parlamentar, sino a oír. Sólo los bostezos amenizan los discursos”.   Así de claro. 

sábado, 3 de octubre de 2015

UNA SOLA CARNE

…ya no son dos, sino una sola carne.
(Mc. 10,2-16)


Hombre y mujer es la página magna
de tu creación, Señor,
igualdad sellada en el amor,  
instrumento de humanidad.

Varón y hembra son tus sustantivos, ¡oh Dios!,
más que la brisa y el agua,
más que el fuego y el trigo,
más que la flor de azahar.

Una sola carne labrada en tu gozo
a muy buen precio,
y no a golpe de ilusorias rebajas
en los tendales del hedonismo, de la sumisión.

Mujer y varón
no son el destino de la mediocridad
en una sociedad con derecho
a la propiedad privada.

Los fariseos
-¡faltaría más!-
quisieron poner a prueba a Jesús,
pero Él rompió los tabús de su Ley.

Hombre y mujer serán una sola carne,
como Tú, Padre, y la humanidad sois una sola carne…

Ambos
mirarán juntos la vida que salió
de tus manos creadoras.

Manos identificadas con los niños
indefensos 
en la fuente original de la vida.

viernes, 2 de octubre de 2015

EL PAPA PISA TIERRA

  
En un país que, como Cuba, la palabra revolución y su "culto" están muy presentes entre la ciudadanía. La invitación del Papa Francisco, desde el Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, en Santiago, a vivir, como María, la "revolución de la ternura" , ha tenido un enorme impacto en la Isla y fuera de ella. Dijo Francisco textualmente: Estamos invitados a vivir la revolución de la ternura como María, Madre de la Caridad. Estamos invitadosa "salir de casa",a tener los ojos y el corazón abiertos a los demás.

Por primera vez en la historia, escribía mi admirado teólogo José M. Castillo, un papa pronunció un discurso en el Capitolio de Washintong, dirigiéndose a los congresistas de la primera potencia mundial. El Papa no se anduvo por las ramas. Y fue derecho a los asuntos que más directamente afectan a la enorme mayoría de los habitantes del planeta.
Sabemos bien que algunos de los temas, que allí planteó Francisco, no son precisamente los que mejor suenan en los oídos de muchos legisladores que allí le escucharon. “Si es verdad que la política debe servir a la persona humana, no puede ser esclava de la economía y de las finanzas”, dijo el Obispo de Roma ante el Congreso en el que la mayoría de sus miembros son millonarios al servicio de los intereses turbios e inconfesables de los mercados.
Si a esto sumamos la condena inapelable del tráfico de armamentos, de la guerras, el pronunciamiento en contra de la pena de muerte y la solidaridad con los pobres del mundo, todo esto debió sonar en el Congreso de Estados Unidos como, hace años, sonaron en toda América los discursos proféticos de Martin Luther King…
Por suerte, el Papa Francisco no se cansa de repetir que tenemos que recuperar el Evangelio, que tenemos que leerlo, meditarlo, entenderlo, llevarlo en el bolsillo. Si no hacemos esto, y si no se hace vida en nosotros, caemos sin más remedio en el cristianismo de la mentira y el engaño…
El Papa, gracias al Espíritu, no se queda en la especulación de los pensadores teológicos más excelsos. Este Papa lleva consigo, incorporado en su vida, el “recuerdo peligroso” de Jesús.

A estas alturas, podemos asegurar que el Espíritu está soplando fuerte y la brisa nueva ya no hay quien la pare. El Papa Francisco está felizmente empeñado en abrir todas las ventanas. Ha sonado la hora de la esperanza.