Bolinaga. ¿Razones humanitarias? Las hienas tienen mejor corazón. Ojo por ojo, no. Simplemente, que pene por tanta pena y dolor que ha creado… Ni excarcelación, ni tercer grado. En su celda y con todos los paliativos que exijan las razones humanitarias. Libertad condicional es poner en evidencia juez y gobierno. Su cáncer, como el de Oteiza y otros etarras, es el espejo del cáncer que ellos mismos han sembrado en nuestra sociedad inocente. Su excarcelación se ciñe a la Ley, según el PP. ¡Sí!, a la ley electoral que está por venir…
Bretón. Otro loco con “B” de Bolinaga. Presunción de inocencia, mientras sigue la lenta investigación y más el destrozo familiar… ¡Qué horror! Se sigue alimentando el morbo mediático.
Alberto Contador. Ha ganado la etapa y, quizá ya, la misma Vuelta. Pero lo que ha ganado aún más es su dignidad y su coraje contra todos los manipuladores ansiosos de destruir a todo un campeón. Son ellos quienes se han indisgestado del clenbuterol de la polémica servida con aditivos de envidias y demás condimentos… Purito, otro gran héroe a quien también mirarán con lupa los mismísimos ojos del antideporte. ¡Dos grandes de España, sin olvidar a cuando pedalean estos días a su lado!
Premio Príncipe de Asturias. Iker y Xavi, el triunfo de la rivalidad deportiva en convivencia con la amistad y la profesionalidad. Llevan jugando juntos en la selección desde los 17 años, y son, más allá de los innumerables títulos conseguidos en su carrera, un ejemplo de concordia entre deportistas. ¡El arte de ser campeones! Ejemplo y estímulo para una juventud hambrienta de auténticos ídolos.
Paraolimpiadas. Medallas, y no sólo hispánicas, a la grandeza de la igualdad humana. Campeones absolutos. ¡A todos los competidores, medallas de bronce, plata, oro y platino! ¡A todos!
Siria. La locura de los dictadores ha conquistado trono en la tragedia humana. ¡Delito de lesa humanidad! ¿Hasta cuándo, mundo loco?
Radiografía insotenible. El paro que no para; morosidad, impagos, desahucios; entidades financieras, especuladores y promotores inmobiliarios enriquecidos; sueldazos de parlamentarios intocables; corruptelas políticas desmanteladoras de la credibilidad del Estado…, y mientras se nos exige a los españolitos de a pie esfuerzo, paciencia y cinturón apretado… Y ¡ojo!, en unos meses, nuestros políticos volverán a pedirnos el voto y la confianza, asomando inmensas sonrisas.
… Valgan estos puntos suspensivos para que tú, amigo lector,
añadas otras “lindezas”.
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