¡FELIZ SEMANA SANTA!
Ante la gran Semana de nuestra fe, no hemos de quedarnos en su aspecto dolorista. La pasión y muerte del Señor nos hablan de compromiso. Toda la vida de Jesús fue desvivirse por la causa de Dios y el servicio liberador a los hombres. Su muerte es un “canto” a la fidelidad al Padre y a su solidaridad con los hombres. En la contemplación de las imágenes sufrientes es fácil quedarse en la mera contemplación del sufrimiento del Crucificado y su Madre, sin remarcar el mensaje profético de ser cirineos de nuestros hermanos excluidos, que es nuestra misión como seguidores de su cruz…